martes, 1 de febrero de 2011

No más relojes en la oscuridad

a Antonio Vega

¿Puede ser todo
mentira?
Incluso caer,
sin levantarse
ya sin pulmón
o una bien adornada
 letra y canción
qué más da
si fue pasado
o no
lo que ya no es.
Sólo
me encuentro
en mis papeles
palabras y silencios
locos
piensan,
salen
un circo
inmortal
y una decima
de segundo,
me enseñan
lo que ignoro
de tí.

"No cambiaría jamás, este universo informal
donde crecen las semillas de lo absurdo y lo genial,
donde el hierro se retuerce y se convierte en lo esencial."

Tengo un reloj
y treinta horas
no se detienen
se pone en marcha
…escribir,
¿Cuándo se va la noción?
Y me acerco
lentamente
…a ti.

Como un torrente
¡poderoso!,
pensamiento, acorralado
mezcla
barro
cristal,
dejar de ser
material;  ideas: emergen
hasta el papel
cobran forma, lugar
la locura y la paz.

Mundo fue,
por ser y siendo
no dejar de ser ¿Será?,
muerte vacía y silenciosa,
habitación
hotel
ventanas al mar.

Oigo tu voz pedir
nunca existirá
recordar
lo que no llego
y pasar.

Aprendido, también
ser una pieza más
un eslabón
la oscuridad.

¿Hay una forma?,
¿parar el tiempo?
antes del final,
desorden
evolución
la prehistoria
esos ojos
y no puedo
olvidar.

No me da miedo
lo que digas,
ni esas historias
ni el más allá,
sólo me asusta
escuchar
los relojes
y la oscuridad.

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